El problema no es propio de primavera; una de las razones por las que aumenta una alergia en otoño es la falta de ventilación en la casa, pues al estar todo cerrado los ácaros del polvo se reproducen.
Una alergia es una respuesta exagerada a la presencia de una sustancia dañina para el organismo; en el otoño tres de las más comunes son la rinitis alérgica, el asma y las alergias a mascotas.
Alergia en otoño; causas y consejos para reducirla
La rinitis alérgica suele ser una reacción al polvo o polen; el asma lo pueden producir los ácaros, pólenes, epitelios de animales, alimentos y hongos, mientras que las alergias a las mascotas aumentan en otoño también por los ácaros y los hongos (la caspa en las mascotas aumenta el problema).
Hay que tener buena ventilación en casa y cambiar los filtros si tienes aire acondicionado o calefacción. Mantén las sábanas y cobijas limpias y si tu problema es el polen, evita los lugares con muchas hojas caducas.
Por cierto ¿Qué es un ácaro?
Listos o no, aquí va la respuesta: los ácaros son artrópodos arácnidos que muy raramente superan el medio milímetro de tamaño, que viven en el polvo de tu casa y se alimentan de materia orgánica de contenido proteico (las escamas de tu piel o restos de alimentos, por ejemplo). Son millares, y sus heces tienen las sustancias responsables de muchas alergias: los alérgenos.
LA RAZÓN
