Recientemente se dio el descubrimiento de un dinosaurio con cuernos que vivió en Nuevo México hace 82 millones de años, por lo cual es una de las primeras especies de ceratópsidos conocidas, los dotados con cuernos o volantes. Con este hallazgo se arroja más información a la luz sobre la subfamilia centrosaurina de dinosaurios cornudos, de los cuales se cree que Menefeeceratops es el miembro más antiguo.
De acuerdo con los investigadores estos restos ofrecen una imagen más clara del camino evolutivo del grupo antes de que se extinguiera al final del Cretácico, además Peter Dodson, investigador de la Facultad de Medicina Veterinaria en la Universidad de Pensilvania declaró que «ha habido un aumento sorprendente en nuestro conocimiento de la diversidad de ceratópsidos durante las últimas dos décadas», lo cual es un gran avance.
Asimismo comentó, que «mucho de eso ha resultado de descubrimientos más al norte, desde Utah hasta Alberta. Es particularmente emocionante que este hallazgo tan al sur sea significativamente más antiguo que cualquier descubrimiento anterior de ceratópsidos. Subraya la importancia de la fauna de dinosaurios de Menefee para comprender la evolución de las faunas de dinosaurios del Cretácico tardío en todo el oeste de América del Norte».
¿Qué se sabe del hallazgo?
El espécimen fósil de la nueva especie, que incluye múltiples huesos de un individuo, fue descubierto en rocas del Cretácico de la Formación Menefee en el noroeste de Nuevo México en 1996, posteriormente se recogió el espécimen y más tarde se describió brevemente, y ahora una investigación arrojó nueva luz importante sobre los fósiles.
Además de ello se sabe que Menefeeceratops está relacionado pero es anterior al Triceratops, y era un miembro relativamente pequeño del grupo, que crecía entre cuatro y cinco metros de largo, en comparación con Triceratops, el cual tenía la facultad de crecer hasta 10 metros de largo.
Gracias a las características de Menefeeceratops con otros dinosaurios ceratópsidos el equipo de investigación pudo rastrear sus relaciones evolutivas determinando que este no solo es uno de los ceratopsidos centrosaurinos más antiguos conocidos, sino también uno de los más basales evolutivamente.
Con información de Europa Press
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