Guillermina Reyes llegó desde Puebla a la Fundación de Cáncer de Mama A.C. (Fucam), en Coyoacán, para continuar con sus sesiones de quimioterapia, pero le informaron que el tratamiento gratuito en esa institución terminó.
“Llegué hoy y me dijeron que me iban a poner la quimio, pero ya no hay nada. Nosotros somos pobres ¿cómo le voy a hacer ahora?”, cuestionó la mujer que se manifestó en calzada de Tlalpan.
Ella es una de las ocho mil 300 mujeres en activo atendidas en Fucam que se quedaron sin la gratuidad debido a que no se concretó aún un convenio entre la organización y el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
En un comunicado, la ONG informó que por la falta de acuerdo estaban “imposibilitados para continuar brindando atención gratuita a la población más desprotegida del país”.
Ésta dependía casi totalmente del convenio con el Seguro Popular, que se venció el 1 de enero cuando desapareció el organismo. La consecuencia fue que las afiliadas ya no reciben servicios sin costo, dijo la fundación, la cual —agregó— asumió los gastos con recursos propios, pero debido a que no alcanza empezó a cobrar cuotas de recuperación.
Irma Reyes llegó a Fucam hace un año. Ayer no le cobraron una curación, pero las siguientes consultas van a costarle 90 pesos y en medicina interna 600 pesos, y más adelante va a necesitar radiaciones que costarían hasta 70 mil.
“Me sentí mal. Luego no traemos ni para comer ni para pasajes. Vendía dulces afuera de mi casa, pero con la enfermedad, mi puesto se vino para abajo, tengo que pedir dinero para atenderme”, dijo al salir.
Juan Alberto Tenorio, director de Enseñanza e Investigación de Fucam, señaló que 90 por ciento de las pacientes que atienden recibe la gratuidad.
El directivo destacó que dependían del financiamiento público para brindar la gratuidad. “No es que el Insabi nos haya negado el convenio, sino que a la fecha simplemente no hay un convenio. Seguimos abiertos para establecer una relación formal”, agregó.
Dijo que en la medida de sus posibilidades la fundación va a cubrir unos servicios y otros van a ser con cuota simbólica.
En el caso de las quimioterapias, por ejemplo, las pacientes van a ser canalizadas a tres hospitales: Instituto Nacional de Cancerología, Hospital Juárez y Hospital General.
La noticia provocó que una veintena de mujeres con cáncer bloquearan Tlalpan para exigir al gobierno que garantice atención y medicamentos, además de que mantenga la colaboración con la Fucam.
Por la noche, sin hacer referencia a ningún convenio, el Insabi aseguró que las pacientes con nuevos diagnósticos se van a remitir a estos hospitales y van a tener atención gratuita.
“La Fucam se comprometió con el Insabi a seguir atendiendo a las personas que ya recibían tratamientos, mismos que ya están cubiertos por el gobierno federal”, indicó.
El instituto, a cargo de Juan Antonio Ferrer, señaló que los tratamientos de la Fucam son costeados con dinero público y de 2017 a 2019 pagó 776 millones de pesos.
Heraldo de México