Rogelio Jiménez Pons, designado como director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), planea recortar hasta 50 por ciento de su plantilla laboral como parte de una reingeniería del organismo encargado del diseño de polos turísticos.
Aunque el futuro funcionario aún desconoce cuántas personas serán liquidadas, dijo que Fonatur cuenta con una plantilla laboral temporal de más de mil 200 empleados.
El plan es hacer un “ajuste por arriba del 50 por ciento de la plantilla para optimizar” la operación de Fonatur, señaló Jiménez Pons luego de participar en el Congreso Internacional del Consejo Nacional Empresarial Turístico.
Entre estos ajustes, abundó, se liquidará a Fonatur-Constructora, la cual “está tronada”, y se creará un fideicomiso en bienes raíces (Fibra) para obtener recursos provenientes del mercado bursátil. Fonatur ya no se dedicará a la compra-venta de terrenos, adelantó Jiménez Pons.
Según Jiménez Pons, esta sería una segunda restructura de Fonatur luego de que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto alegó haber recibido a un Fonatur en problemas financieros. Durante el sexenio de Felipe Calderón, el entonces director general, Miguel Gómez Mont, también llevó a cabo una reingeniería que involucró el despido de 20 por ciento de la plantilla laboral.
Según el gobierno federal, el Fonatur genera nuevos proyectos turísticos en condiciones de sustentabilidad, competitividad, productividad, integralidad y preservación del equilibrio ecológico, y fomenta la inversión turística y la venta de terrenos a inversionistas. Entre otras filiales están Fonatur-Mantenimiento, que se encarga de las tarea de limpieza de los centros integralmente planeados como Cancún y Los Cabos, y Fonatur Operadora Portuaria, encargada de administrar las marinas en diversos puntos del país, como Puerto Peñasco, Sonora.
Fuente: La Jornada