Las autoridades chinas aprobaron ayer la primera patente de una vacuna contra el coronavirus en su país.
La Administración Nacional de Propiedad Intelectual avaló la Ad5-nCoV, creada por la Academia de Ciencias Militares y la empresa Cansino Biologics.
La vacuna, que fue la primera en entrar en la fase de ensayos clínicos, utiliza un virus debilitado del resfriado común (adenovirus tipo 5) para introducir material genético del nuevo coronavirus dentro del cuerpo humano. El objetivo de esta sustancia es entrenar al cuerpo a que produzca anticuerpos que reconozcan la proteína en forma de lanza del coronavirus SARS-CoV-2 y lo combatan.
Se espera que la vacuna logre crear inmunidad frente al virus en roedores.
Puede crear una respuesta inmune celular en un corto periodo”, consignó la prensa gubernamental del país asiático donde surgió el coronavirus en diciembre del año pasado.
Hasta ahora, ninguno de los 500 voluntarios ha estado en contacto con el coronavirus, como parte de los protocolos de los ensayos.
La pandemia de coronavirus, que suma a nivel global más de 21 millones de casos y 775 mil fallecidos, derivó también en una carrera por la obtención de una vacuna eficaz.
Rusia se convirtió la semana pasada en el primer país en informar del registro y la fabricación de una vacuna, que fue bautizada como Sputnik V.
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