De llamar la atención que una vez ganando Morena la gubernatura del Estado de México, lo primero que el Gobierno federal está visualizando es cómo asumir el control de uno de los sistemas estatales de salud más importantes del país. La gobernadora electa Delfina Gómez toma posesión hasta septiembre próximo, pero ya están entrando en el tema y visualizando pasos desde antes de asumir.
En el Estado de México el presupuesto para la atención de la salud suma este año 46,826 millones de pesos. No es el que tiene la mejor cobertura y atención para sus cerca de 17 millones de habitantes, pero sí de los que recibe los mayores presupuestos en este ámbito. Y de los que se tiene un manejo histórico discrecional que en toda la época dominante del PRI es sabido era como la caja chica para usos electorales.
Así que no es gratuito que esta misma semana tras el triunfo de Morena hayan sucedido dos cosas en torno al sector salud de esa entidad.
Primero, el jefe del Ejecutivo López Obrador declaró que ya había hablado con la maestra Delfina sobre el tema y que “ella está totalmente de acuerdo que todo el Estado de México se atienda con el sistema IMSS-Bienestar”. Y así como lo comentó, dan por hecho que el IMSS-Bienestar va a tomar el lugar y asumir las funciones no sólo de la Secretaría estatal de Salud sino también del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (Issemym). Aquí, claramente su comentario fue retórico o el presidente no tiene toda la información.
Seguramente Morena ya analizó la situación del estado de México y ya vieron que no pueden apropiarse del Issemym; en principio tiene su propia ley -tendrían que abrogarla- y por lo demás, de qué les serviría pues es un organismo que está quebrado. Ellos mismos decidieron quebrarlo cuando no aceptaron la nueva ley que hace algunos años presentó el gobierno de Alfredo Del Mazo donde daba solución a la deuda arrastrada por dicho instituto con una reestructura profunda que incluía aumentar la cuota a los trabajadores aportantes.
Hoy el Issemym antes que nada requiere una estrategia de saneamiento financiero, y aparte tiene varios contratos firmados bajo la modalidad de inversión público privada, además de que el gobierno de Delfina tendría que garantizar el pago de pensiones y ello implica otra reforma adicional. Considérese además que Morena no tiene mayoría en el Congreso del Estado.
Eduardo Salazar, exasesor de la Legislatura, quien junto con organizaciones civiles viene desarrollando desde hace 3 años una iniciativa de ley de salud con mayor conocimiento y con apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), comenta que es muy aventurado que desde su primer año de funciones la próxima gobernadora se anime a querer desaparecer el Issemym. En principio, tendría que enfrentarse a movilizaciones de los sindicalizados -trabajadores del estado y los municipios, incluidos miles de maestros, el mismo jueves se pusieron en pie de guerra emitiendo su posicionamiento- que son derechohabientes de Issemym y que no están dispuestos a perder sus derechos de seguridad social, incluidas sus pensiones.
El tema de los adeudos de Issemym es otro tema, pues si Delfina está considerando rescatar dicho instituto tendría primero que ver cómo cubrir los adeudos que son de varios miles de millones de pesos. Entre los deudores está la Universidad Autónoma del Estado de México y una gran parte de los municipios.
Por otro lado -y es el otro suceso-, la diputada local Rosa María Zetina presentó el jueves 8 de junio una iniciativa de “Ley de Salud del Estado de México y sus Municipios” -es el único estado que no tiene ley de salud dado que desde el 2001 fue abrogada por el entonces gobernador Arturo Montiel.
Total, que los movimientos del presidente López Obrador en Edomex pareciera un dardo lanzado quizá por razones políticas -porque quiere medir el nivel de reacción- u otra posibilidad, porque no tiene bien la información y quien lo asesora lo está haciendo mal.
¿Qué hace el DG del ISSSTE copresentando iniciativas en Edomex?
Pero algo sumamente extraño es que dicha iniciativa de la legisladora mexiquense fue copresentada junto con Pedro Mario Zenteno Santaella -sí, el director general del ISSSTE-. Evidentemente al comandante Z -como le llaman en la misma 4T- le interesa por demás estar en los temas de su entidad, pues él es originario de Teoloyucan donde fue presidente municipal en los años 90. Pero siendo hoy titular de un organismo público descentralizado como el ISSSTE está por lo menos excediendo sus competencias presentando una iniciativa en una entidad federativa. Quizá como legislador federal con licencia estaría en esa capacidad, pero teniendo el cargo de titular del ISSSTE ¿con qué autoridad puede ser copresentador de una iniciativa?
SHCP se compromete a pagar adeudos de Insabi
Los representantes de la industria farmacéutica se quedaron más tranquilos tras la reunión la semana pasada con el equipo de la Oficialía Mayor de Hacienda que les aseguró que hay instrucciones superiores de que antes de extinguir por completo el Insabi se salden todos sus adeudos, pero sí les pidió que no detengan el flujo de entrega de medicamentos a las instituciones y que primero se paguen multas. Conforme nos comenta Juan de Villafranca, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf), en la sesión estuvo representada Canifarma, AMIIF, Andis y Amelaf, y de parte del Gobierno, aparte de la OM, también el Insabi -que estuvo representada por Alejandro Calderón Alipi, excoordinador de abasto- y gente de la Función Pública que se supone estará acompañando el proceso hasta el final, para el cual tienen 180 días de acuerdo con las reglas que dan vida al IMSS-Bienestar. Sobre el monto adeudado nadie lo tiene claro; por lo pronto están verificando proveedor por proveedor para definir el adeudo total.
Diversas posturas sobre desaparición de NOMS
En torno a la cancelación de las NOMs de salud impulsada por el subsecretario López-Gatell se están dibujando diversas posiciones. En el área médica no todos las consideran como criterios para la atención de enfermedades. Para algunos médicos el tema se está magnificando. Mencionan que hay muchas referencias nacionales e internacionales mucho más actualizadas y vigentes que indican cómo deben ser los procesos médicos basados en evidencia. Por otro lado hay muchas enfermedades que no tienen NOM y no por eso no es tratada. “Las tratamos porque conocemos la evidencia, guías, consensos elaborados por médicos no por abogados”, nos comenta un reconocido médico. La medicina, nos dice, no puede practicarse con base en lineamientos hechos por abogados en lenguaje difícil y rebuscado. Si se trata de defender derechos es otra cosa pero para eso no se necesita una norma por cada enfermedad.
Y es que sí hay NOMs de salud que establecen criterios muy rígidos y eso genera problemas, incluso asunto de litigios y responsabilidades de médicos. Lo que debe quedar claro es que no son guías de práctica clínica. Una NOM es más bien referencia para instituciones. ¿Pero porqué cancelarlas? Lo que todos esperan son los argumentos que el Gobierno deberá exponer como siguiente paso del proceso para desaparecerlas.
maribel.coronel@eleconomista.mx
EL ECONOMISTA