A diario la gente suele tender la cama, pero muchos tienen la duda de cada cuánto se deben lavar las sábanas.
Antes de que te diga lo que puede esconder una sábana que no se cambia quiero decirte que, de acuerdo con una encuesta hecha hace por la revista estadounidense Women´s Health, 16% de los encuestados reconoció no lavarlas más de una vez al mes y un 32% dijo no cambiarlas… ¡nunca!
Pero es el único sondeo que demuestra el gran número de personas con este mal hábito. Un estudio en Gran Bretaña, hecho por la marca de muebles Hammonds Furniture, revela que uno de cada tres británicos solo lava sus sábanas una vez al año y un 38 por ciento de los encuestados dijo que las lavaba de manera poco frecuente sin ser más específicos.
¿QUÉ ESCONDEN LAS SÁBANAS QUE NO SE LAVAN?
Cada vez que nos metemos a la cama la estamos ensuciando poco a poco con células muertas, pelo, sudor, polvo, maquillaje y todo aquello que atrapamos en nuestra actividad diaria.
Médicos coinciden en que el lavado de las sábanas debe ser una vez a la semana como mínimo. El doctor Dr. Giuseppe Aragona de la Universidad de Messina, en italia explica que «lavar la ropa y las sábanas con regularidad es importante para la limpieza general, pero también para garantizar que el cuerpo se mantenga limpio y saludable. Si no se lava la ropa con frecuencia, se puede correr el riesgo de contraer una infección o, simplemente, sentirse y oler a sucio».
Las sábanas sucias pueden ser factor de riesgo para desarrollar acné, manchas y otros problemas dermatológicos, ya que las bacterias se mantienen en la piel, a menos que seas de los que se duchen por las noches todos los días sin excepción.
El doctor Philip Tierno Jr., director de microbiología clínica e inmunología en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York, también resolvió la duda a través de un estudio:
Como mínimo, habría que lavar las sábanas una vez a la semana. Además de las células muertas, cremas, maquillaje, sudor y pelos también la vamos llenando de polen, hongos, caspa de animales, comida, partículas de suciedad, entre otros» explica el doctor. Y todas estas partículas llevan su correspondiente dosis de bacterias y otras sustancias que harían que quisiéramos lavarlas diariamente.
TOALLAS Y TAPETES DE BAÑO DEBEN LAVARSE CON MÁS FRECUENCIA
Según la neoyorkina Maeve Richmond, head coach, experta en limpieza y organización, creadora del Método Maeve, las sábanas deberían ir a la lavadora cada semana o dos aunque si hay alguien de la familia está enfermo, se duerme desnudo o si hace mucho calor, “la frecuencia debería ser mayor”.
El lavado recomendado para las toallas de baño, según Richmond, es cada tres o cuatro usos, ya que pueden empezar a oler a humedad o incluso antes si se hace ejercicio y sugiere que los diferentes miembros de la familia no compartan las toallas. Mientras que las toallas de manos deberían cambiarse cada dos o tres días ya que normalmente están colocadas en zonas donde hay muchos gérmenes y las usan varias personas diferentes.
La alfombra del baño también debería ser lavada frecuentemente, cada semana o cada quince días dependiendo del uso ya que suele quedarse húmeda después del baño.
EXCELSIOR