Casi la mitad de la población de Estados Unidos estaba ayer en estados o ciudades que han decretado cuarentena por coronavirus, mientras la Reserva Federal (Fed) anunció medidas extraordinarias y el Senado seguía inmerso en un tenso debate sobre cómo invertir un plan de estímulo de casi dos billones de dólares.
El presidente Donald Trump dio señales de impaciencia ante el derrumbe de los mercados e insinuaba que podría replantearse o suavizar la recomendación de tomar medidas para aumentar la distancia social. “No podemos dejar que el remedio sea peor que el problema”, tuiteó.
Seis estados —Michigan, Wisconsin, Massachusetts, Indiana, Oregon y Virginia Occidental— se sumaron a los otros ocho que han decretado confinamiento, lo que afecta a 42% de la población.
La cifra se eleva al 46% al sumar los más de cinco millones de habitantes de localidades con cuarentena.
Heraldo de México