Japón comenzó a celebrar la Semana Dorada, con motivo de la nueva era Reiwa, que inicia el próximo primero de mayo cuando el príncipe Naruhito se convierta en nuevo emperador en sucesión de su padre, Akihito.
Se trata de un periodo vacacional de diez días, el más prolongado en la historia de Japón, para conmemorar la abdicación del emperador Akihito, que el próximo martes 30 de abril cederá a su hijo Naruhito, de 59 años, el Trono de Crisantemo, en la primera abdicación en más de dos siglos.
Las autopistas, estaciones de trenes y aeropuertos del país se encuentran abarrotados por miles de personas que se dirigen a sus localidades de origen y lugares turísticos para disfrutar del periodo feriado de 10 días, reportó la cadena NHK.
Las compañías de ferrocarriles JR prevén que el número de viajeros de los trenes bala o Shinkansen que salen de las áreas metropolitanas alcanzará su máximo este sábado. También señalaron que los pasajes reservados de las principales líneas, incluyendo la Tokaido y la Sanyo, están prácticamente agotados.
Por su parte, las aerolíneas japonesas destacaron que muchos de sus vuelos que parten de Tokio y Osaka están a su máxima capacidad.
La marcha de Akihito supone el inicio de una nueva era en Japón, la Reiwa, la suma de dos caracteres kanji. La palabra está compuesta por los ideogramas ‘rei’ -hermoso- y ‘wa’ -armonía- y procede del Manyosu, la más antigua colección de poesía japonesa, escrita hace más de mil 200 años.
La abdicación de Akihito, la primera que tendrá lugar en Japón desde la cesión del trono de Kokaku en 1817, tendrá lugar tres años después de que el monarca manifestó su deseo de abandonar el trono debido a su avanzada edad y su delicado estado de salud.
Akihito se convirtió en el 125 emperador de Japón el 7 de enero de 1989, a los 55 años, tras la muerte de su padre Hirohito, en cuyo nombre el país combatió en la Segunda Guerra Mundial.
La Jornada