Miles de manifestantes en Marruecos condenaron las sentencias a prisión que recibieron el líder del movimiento antipobreza Hirak Rif y decenas de otros activistas.
La protesta paralizó una de las principales avenidas de Rabat, la capital de Marruecos, el domingo. Las fuerzas de seguridad se mantenían vigilantes mientras los participantes coreaban “La gente quiere que liberen a los detenidos” y “Viva Rif”.
El líder de Hirak, Nasser Zefzafi, fue sentenciado a la pena máxima en prisión de 20 años por poner en riesgo a la seguridad estatal. Una corte de apelaciones ratificó su sentencia y la de otros activistas en este mes.
Rif es la región en apuros en el norte de Marruecos en donde el movimiento Hirak se fundó en 2006. El movimiento exige desarrollo y creación de empleos para la región.
Las familias, organizaciones defensoras de derechos humanos y partidos de la izquierda exigen la liberación inmediata de los encarcelados.
La Jornada