El acuerdo para prohibir a la CFE firmar contratos o asociaciones con empresas privadas cerrará el mercado a los nuevos participantes y la posibilidad de un mayor desarrollo delsector eléctrico en el mediano y largo plazo.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio, Gonzalo Monroy, director de la consultora GMEC, la reagrupación de la empresa es “un paso que nos acerca más a un monopolio que a un mercado competitivo”, lo que además sujetará a la empresa a decisiones políticas.
Dijo que esto se suma a la cancelación de las subastas, lo que afectará a las energías renovables y al desarrollo de nueva infraestructura.
En los comentarios emitidos en la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Conamer), advierten que, al cerrar la participación privada, se podría generar el riesgo de potenciales apagones.
Ante esto, Víctor Ramírez, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Energía Solar (ANES), dijo que el prohibir las alianzas o contratos públicos privados afectará el desarrollo de las líneas de transmisión, pues se trata de proyectos de envergadura que requieren grandes capitales.
No estamos seguros que el gobierno o la empresa tengan el capital necesario para invertir en nuevas líneas de transmisión, por lo que se podría limitar estos desarrollos”.
Los expertos consideran que el sector quedará restringido, por lo que su desarrollo se basará en sus necesidades y no las del mercado. Sobre el tema, Daniel Chacón, vocero de Plataforma México, Clima y Energía, explicó que la división de la CFE tuvo como objetivo fomentar un piso parejo en un mercado eléctrico abierto.
Advirtió que, si la empresa se reagrupa, la competitividad se verá afectada, lo cual, en conjunto con la cancelación de las rondas, provocará mayores “barreras para que haya inversiones y cumplir las metas en energías renovables”.
— Con información de Nayeli González
Fuente: Dinero en imagen
