El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, intentó despejar este lunes los temores a una abrupta retirada de las tropas estadunidenses de Siria y dijo que ésta se hará a un «ritmo adecuado» y de manera «prudente».
«¡Dejaremos (Siria) a un ritmo adecuado mientras que continuaremos luchando contra el Estado Islámico y haciendo todo lo que sea prudente y necesario!», tuiteó el mandatario.
Trump había quedado en el centro de las críticas dentro y fuera de su país por haber dicho que creía que el EI había desaparecido y que quería que las tropas estadounidenses se retiraran de Siria de inmediato.
Las nuevas declaraciones del presidente se dan después de un viaje de su asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, a Israel, donde el domingo le dijo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que la retirada no ocurrirá hasta que el Estado Islámico «esté derrotado y no pueda reponerse».
Estas afirmaciones siguieron a la tormenta diplomática provocada por el sorpresivo anuncio de Trump el 19 de diciembre que apuntaba a una retirada inmediata de Siria, donde unos 2 mil efectivos estadounidenses juegan un rol importante en el apoyo a las fuerzas locales en la lucha contra el EI.
«Le ganamos al Estado Islámico», dijo en su momento. «Recuperamos el territorio y ahora es hora de que nuestras tropas vuelvan a casa», aseguró.
Aliados como Reino Unido y Francia advirtieron que el EI no estaba derrotado y surgieron dudas también sobre el futuro de los grupos kurdos que combatieron al grupo yihadista junto a Estados Unidos en Siria, pero ahora podrían convertirse en objetivo de ataques desde Turquía.
El anuncio de la retirada también provocó fuerte oposición dentro del Partido Republicano de Trump y la renuncia del secretario de Defensa, James Mattis.
En sus tuits del lunes, Trump se quejó de que los medios distorsionaron sus palabras originales y aseguró que su postura actual sobre Siria «no es muy diferente» a su declaración original.
Fuente: La Jornada