Aleida Ruiz Sosa, oriunda de Oaxaca es una bailarina de 16 años que ha dedicado su corta vida al activismo en pro de la sociedad, en este momento su lucha se ha centrado contra el matrimonio infantil en su Estado.
Sus acciones se vieron desencadenadas en febrero del 2021 cuando la artista tuvo un acercamiento al caso de un niña de 12 años que había quedado embarazada por su abusador de 60 años. Esto la motivó a lanzar su campaña.
“La familia no quiso denunciar, su decisión fue casarla con su violador. En ese entonces yo tenía 14 años y pensar pasar por algo así me resultaba terrible. Sentía tristeza. Me preguntaba ¿por qué no la rescataron? ¿por qué nadie hacía nada?, me puse a investigar y me encontré con miles de casos”, comentó la joven en entrevista para Quadratín.
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Aleida consiguió impartir un taller de ballet clásico y acondicionamiento físico como parte de la campaña “Que las niñas sean niñas y no esposas”, la planeación de esta ruta de visitas tiene como objetivo que las participantes se conecten con sus capacidades artísticas mientras conocen sus derechos humanos.
“Cada día, más de 40 000 niñas se casan antes de cumplir 18 años, las complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto son aún la segunda causa de muerte entre las chicas de 15 a 19 añosy se estima que unos 120 millones de niñas en todo el mundo han sido víctimas de violación u otros actos sexuales forzados en algún momento de su vida”, comparte la joven en un post de su Instagram.
De enero a junio de este año, la bailarina estuvo en 9 localidades donde tuvo acercamiento con tres uniones forzadas, entre ellas una niña de 10 años con un hombre de 50. Dos de estos casos ya se encuentran en investigación, pues gracias a su labor de sensibilización se logró que fueran denunciados formalmente.
Como resultado de esto, 5 casos más en un municipio del Istmo de Tehuantepec fueron denunciados por las víctimas, quienes fueron motivadas por la labor de Aleida.
“No se ha enseñado a las niñas que ellas tienen oportunidad de salir al mundo, de conocer una realidad diferente. Cambiar la mentalidad puede ser muy difícil, pero es posible”, mencionó en entrevista la bailarina de 16 años de edad.
Actualmente es embajadora de la Paz de Iberoamérica y El Caribe, nombrada por la Comisión Iberoamericana de Derechos Humanos para el Desarrollo de las Américas, además, por segundo año consecutivo se encuentra nominada al Premio Internacional de la Paz Infantil que otorga la fundación Kids Rights.
Las acciones de la joven no se limitan a un día de la semana, pues a través de sus redes sociales también se dedica a compartir información y post de concientización y sensibilización acerca de diversos temas como el apoyo a niños con cáncer, a perros y gatos en situación de calle e incluso exponer casos de feminicidio infantil.
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