Convoca gobierno de Colombia a diálogo con manifestantes

El presidente conservador Iván Duque convocó a una reunión el martes a los promotores de las protestas en contra de su gobierno, que tienen cinco días en las calles de Colombia manifestándose contra su administración.

«Mañana se reunirá el presidente con los representantes del paro nacional», dijo la ministra de Trabajo, Alicia Arango, en una declaración a la prensa en la Casa de Nariño, sede de gobierno.

El encuentro con el Comité Nacional del Paro, que reúne a sindicatos, estudiantes y partidos opositores, se realizará en durante el llamado «diálogo social» convocado por el jefe de Estado en respuesta a las manifestaciones en contra de sus políticas sociales, económicas y de seguridad.

Después de ese encuentro habrá «una reunión ampliada donde estarán otros sectores de la sociedad que también quieren contar sus inquietudes», y en la que el gobierno espera que participen los convocantes del llamado paro nacional del 21 de noviembre, comentó Arango.

Presionado por las movilizaciones y con una popularidad en rojo, Duque llamó el viernes a una «conversación nacional» con «los sectores políticos y sociales» para debatir «reformas» a su política social.

Sin embargo, desde entonces reiteró su llamado a conversar sin invitar directamente a los manifestantes, que lideraron la mayor convocatoria en contra de un gobierno en los últimos tiempos.

El «diálogo social» comenzó el domingo, tres días antes de lo previsto, con alcaldes y gobernadores electos, y continuó este martes con representantes de los patrones y de los empleados, no reconocidos por los promotores del paro.

El Comité Nacional del Paro llamó a la marcha del 21 de noviembre, en la que participaron cientos de miles de colombianos, y de la que desde entonces surgieron movilizaciones callejeras lideradas mayoritariamente por jóvenes.

Los convocantes son de sectores tan amplios como los reclamos y exigencias contra el gobierno de Duque, que con poco más de quince meses en el poder luce debilitado.

Las centrales obreras rechazan supuestas iniciativas gubernamentales para flexibilizar el mercado laboral y las pensiones. Los estudiantes reclaman más recursos para la educación pública, y los indígenas, que no hacen parte del comité, exigen protección tras el asesinato de decenas de ellos desde que Duque asumió el poder en agosto de 2018.

Todos cuestionan el asesinato de líderes sociales y el intento de modificar el pacto de paz de 2016 que desarmó a la ex guerrilla FARC, que también ha participado en las marchas.

 

La Jornada

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *