Con el fin de evitar la entrada de enfermedades y plagas cuarentenarias (que no existen en México), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), puso en marcha a partir del lunes 4 de noviembre y hasta el miércoles 11 de diciembre, el Programa de Verificación a la Importación de Árboles de Navidad, en puertos, aeropuertos y fronteras.
Como desde hace 14 años, la Profepa revisará de manera aleatoria los embarques de pinos que ingresen a territorio nacional principalmente de Oregón, Estados Unidos, y que se comercializan con motivo de las fiestas decembrinas.
El operativo busca que los ejemplares introducidos al país cumplan con las normas oficiales mexicanas y a su vez, eviten el ingreso de plagas, tales como insectos y hongos que puedan poner en riesgo la salud de la población y de los recursos forestales.
Los árboles de Navidad entran por la frontera norte, en cinco entidades federativas y nueve puntos específicos: Mexicali y Tijuana, Baja California; Piedras Negras, Coahuila; Zaragoza, Chihuahua; Colombia, Nuevo León; San Luis Río Colorado y Nogales, Sonora, así como Reynosa y Nuevo Laredo, Tamaulipas.
El año pasado entraron a México poco más de 640 mil árboles provenientes de Estados Unidos, de los cuales fueron regresados 1.2 por ciento, es decir, siete mil 735 ejemplares por contener plagas, de conformidad con la Norma Oficial Mexicana 013.
Dinero en imagen