Niki Lauda, triple campeón del mundo de Fórmula Uno, falleció este lunes a los 70 años de edad, confirmó su familia en un comunicado.
«Con profunda tristeza, anunciamos que nuestro amado Niki murió pacíficamente con su familia este lunes 20 de mayo de 2019. Sus realizaciones únicas como atleta y emprendedor son y permanecerán inolvidables; su incansable entusiasmo por la acción, su franqueza y su coraje permanecen un modelo y una referencia para todos nosotros. Era un marido amoroso y atento, padre y abuelo lejos del público, que sentirá su falta».
De acuerdo con el periódico británico Daily Mirror, Lauda se había sometido a una diálisis renal.
El piloto austriaco Niki Lauda fue campeón de la fórmula Uno en 1975, 1977 y 1984. Fue piloto para las escuderías March, BRM, Ferrari. Brabham y McLaren, acumuló 25 victorias y 54 podios en un total de 185 carreras.
Lauda sufrió un grave accidente en el peligroso circuito de Nürburgring, durante el Gran Premio de Alemania en 1976 , que le produjo graves quemaduras que le desfiguraron el rostro y le dejaron marcas de por vida. Se retiró temporalmente de las carreras en 1978 y volvió a la F1 en 1982 en la que siguió corriendo hasta 1985. Luego fue comentarista de carreras de F1 para una cadena alemana de televisión.
A finales de la década de los 90 comenzó a tener problemas renales y le llevó a dos cirugías de trasplante, primero en el 1997 y luego en 2005. Desde hace un año Lauda visitó constantemente el hospital por diversas complicaciones y en diciembre del año pasado se le traspasó un pulmón -en el accidente del ’76, sus pulmones sufrieron mucho debido a todos los gases que inhaló mientras el Ferrari ardía con él al interior.
Después de su carrera como piloto, Lauda siguió ligado al automovilismo: como asesor técnico de Ferrari en los 90 y de Mercedes recientemente, en el que ayudó a cimentar el éxito de los alemanes, cinco campeonatos de constructores seguidos, y los cinco también de pilotos; entre 2001 y 2002 dirigió el equipo Jaguar, pero sin mucho éxito.
Más exitosa fue su aerolínea, Lauda Air, misma que vendió a Austrian Airlines en 2001 solo para fundar otra en 2003 llamada Niki pero que no tuvo el triunfo de la pasada compañía. En 2018 Niki Lauda lo volvió a intentar con Lauda Motion, misma que ya ha sido adquirida al 100% por Ryanair.
La Jornada