El presidente palestino, Mahmoud Abbas, dijo este domingo en una reunión en la capital de Egipto que la situación de los palestinos es muy difícil, insoportable e insostenible, por lo que necesitan del apoyo político y financiero árabe para enfrentar los desafíos futuros.
En una sesión extraordinaria del Consejo de la Liga Árabe en El Cairo, comentó que llamará al Consejo Central, segundo órgano de decisión palestino más importante después del Consejo Nacional, a mediados de mayo próximo, ante las políticas de Israel y Estados Unidos.
Los ministros de Relaciones Exteriores del Consejo de la Liga Árabe se comprometieron a apoyar el presupuesto del Estado Palestino, en una declaración emitida al final de la sesión extraordinaria celebrada en El Cairo.
El relecto primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no cree en la paz, y destacó que bajo su mandato, Israel rompió los acuerdos firmados y violó el Acuerdo de París, al incautar los ingresos fiscales de la Autoridad Palestina, informó la agencia de noticia palestina WAFA.
Tras el reconocimiento estadunidense a Jerusalén como capital de Israel y de transferir su embajada, el cese de la ayuda a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y el cierre de la oficina de la Organización para la Liberación Palestina (OLP) en Washington, «¿qué es lo que queda del llamado Acuerdo del Siglo?», se preguntó el mandatario palestino.
Abbas -cuya autoridad es reconocida en Cisjordania-, anunció también su decisión de lograr la reconciliación nacional de su país, a pesar del rechazo del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que tiene el control de la Franja de Gaza.
«Cumplimos con las responsabilidades que tenemos con nuestra gente en la Franja de Gaza. Suministramos a Gaza un presupuesto de alrededor de 100 millones (de dólares) al mes, pero desafortunadamente Hamás centra su atención en las maniobras para obtener una tregua temporal aquí, y ganar algunas facilidades», señaló.
Abbas estimó que el gobierno israelí transfiere dinero a Hamás para mantener la división, y que incluso Netanyahu ha reconocido que permite que el dinero entre en Gaza para mantener a los palestinos divididos.
El jefe de la Autoridad Palestina también reiteró su rechazo a la anexión de Israel de los territorios árabes ocupados. «No aceptamos la anexión de Jerusalén por Israel. No aceptamos la anexión de los Altos del Golán (sirios) ni la anexión de las granjas libanesas de Shebaa», dijo.
El Consejo destacó que los países árabes que respaldaron la iniciativa de paz árabe de 2002, la cual se logrará de conformidad con el derecho internacional y la legitimidad y debe basarse en el principio de «tierra por paz», no aceptan ningún plan o acuerdo que no esté en línea con estas referencias internacionales.
El Consejo también hizo hincapié en que un acuerdo sólo logrará una paz duradera y general en el Oriente Medio si garantiza los derechos legítimos del pueblo palestino, ante todo su derecho a la libre determinación y el establecimiento de un Estado independiente y autónomo.
La Jornada