Siete niños murieron y otros 10 resultaron heridos el domingo en Afganistán cuando estalló accidentalmente un obús de mortero que habían encontrado, informaron las autoridades.
«Siete niños murieron y otros 10 fueron heridos por un obús de mortero que no había explotado (previamente) y que ellos encontraron» dijo a la AFP el vocero del gobierno provincial, Assadullah Dawlatzai.
El accidente ocurrió al finalizar la tarde en las afueras de Mehtarlam, una ciudad cabecera en la provincia de Langhman, agregó la fuente, y preciso que todas las víctimas tienen menos de 15 años.
En 2017 murieron en Afganistán 150 personas por mes debido a la explosión accidental de minas, granadas, obuses y cohetes que no habían detonado en su momento, según Naciones Unidas. Los niños y adolescentes representan el 80% de las víctimas, de acuerdo con la misma fuente.
Fuente: La Jornada