Además de la estética que una buena postura añade a una persona, no es el único motivo por el que deberías preocuparte por tenerla, y es que se trata de una parte importante de salud a largo plazo.
Hay diferentes malestares provocados por una mala postura, tales como dolor de cuello, cero flexibilidad, dificultad para respirar etc.
Lo mejor que puedes hacer para mejorarla es ser consciente todo el tiempo de ella en tus actividades cotidianas: ver tv, lavar platos, hacer ejercicio, caminar, ¡todo!
El ejercicio también es una excelente manera de mejorar la postura, sobre todo actividades como el yoga.
También debes de cuidar tu peso si no quieres que tus músculos abdominales sean víctimas de esos kilitos de más, ya que se debilitan. Además el dolor lumbar aparece junto con problemas en la pelvis y columna vertebral.
Los zapatos cómodos son importantes. Necesitas un tacón bajo que no aumente la presión sobre tus músculos y dañe la postura.
Si pasas mucho tiempo sentado, cambia frecuentemente tu posición, haz caminatas breves, estírate, asegúrate de que tu pies toquen el piso y que tus muslos y caderas estén bien apoyados.
Si sigues esta guía al pie de la letra, te aseguramos que tu postura mejorará al máximo.
