El ex director de Pemex, Emilio Lozoya Austin dijo que no se presentará este martes frente al juez federal de control, al considerar que no existen condiciones ni garantías legales para hacerlo, ya que agregó, es claro que si se presenta lo van a vincular a proceso, “y van a pretender dictar prisión preventiva justificada”, no obstante que el delito que se imputa no lo amerita.
Manifestó que en el momento en que la Fiscalía General de la República le brinde las garantías a las que tiene derecho “de inmediato estaré dispuesto a colaborar y manifestar la verdad histórica y jurídica de todos los hechos suscitados en el periodo en que me desempeñé como director general de Petróleos Mexicanos, en donde aclararé qué funcionarios del nivel que sea intervinieron en lo que hoy se investiga”.
En una carta el ex funcionario aseveró que nunca se sustrajo a la acción de la justicia y en consecuencia tiene todo el derecho a vincular su libertad, “ya que todas estas acciones son definitivamente una persecución política en mi contra”.
Al respecto dijo que giró instrucciones a sus abogados para que realicen todas y cuantas acciones jurídicas existan para garantizar un justo y debido proceso, del que lo han intentado condenar, violando flagrantemente los principios generados del nuevo sistema penal acusatorio y por ende del estado de derecho, así como la presunción de inocencia e igualdad de las partes, y los derechos humanos consagrados en la constitución, “tanto los míos como de mi hermana e incluso de mi familia.
“Igualmente arbitraria e ilegalmente, la Unidad de Inteligencia Financiera, violando flagrantemente la normas y los criterios jurisprudenciales, ha bloqueado no solo mis cuentas bancarias, sino la de mi esposa y lamentablemente las de mi madre, al igual que las cuentas de las empresas que legalmente están constituidas en México, empresas que son el fruto de mi trabajo en el libre ejercicio de mi profesión. Todo esto afecta a empleados”.
Agrego que en los últimos días se ha divulgado una serie de “infundadas acusaciones a mi persona y familia, sin ningún respaldo legal en especifico a la compra de un inmueble ubicado en el puerto de Ixtapa Zihuatanejo, y supuestos viajes realizados en aviones y helicópteros oficiales; no obstante que el órgano de gobierno encargado de investigar no encontró responsabilidad alguna y por ende determino el archivo definitivo de los procedimientos”.
Reiteró que siempre ha estado dispuesto a decir la verdad con las consecuencias que haya para cualquier persona, “pero recojo las expresiones del señor presidente de la República de ‘nada por encima de la ley y todo dentro del estado de derecho’.
“Igualmente he girado instrucciones a mis representantes legales, para que en mi nombre y representación expliquen a la opinión pública cuál fue mi desempeño, en qué condiciones recibí el encargo de director general de Pemex y cómo la entregué, para que la opinión pública tenga pleno conocimiento de cuál fue el resultado de mi encargo y cómo los que me sucedieron se la entregaron a esta administración”.
La Jornada
