A partir de la convicción de que es imposible construir un nuevo proyecto de nación sin el conocimiento de la historia, el historiador Pedro Salmerón Sanginés acaba de publicar una nueva biografía de Benito Juárez, figura emblemática de la llamada Cuarta transformación encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“La historia es imprescindible para la democracia que necesitamos. No se puede construir un nuevo proyecto de nación sin entenderla”, dice el colaborador de La Jornada, catedrático universitario y director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM).
“La figura de Juárez nos sirve para discutir las cosas que debemos discutir hoy, para entender cuál es la idea de democracia, cómo se discutió ese concepto en aquella época, cómo la podemos discutir hoy, cómo funcionó y cómo funcionaron las libertades públicas en aquel entonces”.
Juárez. La rebelión interminable es el título del libro del especialista, quien para su elaboración se basó en una serie de 52 guiones que realizó en 2006 para una serie radiofónica dedicada a aquel ilustre personaje.
Publicado por Planeta, en su colección Crítica, el volumen fue concebido con fines de divulgación para todos aquellos interesados en la historia nacional.
“Hay bibliotecas enteras sobre Benito Juárez; este libro tiene la intención de ser una puerta de entrada a la comprensión de ese personaje, de su época y de su grupo. Nos lo han escondido y falseado tanto que pensamos en cómo hacer para recuperarlo, recuperar su obra, su tiempo, su legado y qué nos dice hoy”, comenta.
Esta nueva biografía es una respuesta a “la feroz ofensiva” emprendida durante los anteriores tres sexenios contra la figura del ex presidente oaxaqueño, explica Salmerón.
Es una obra de “perfil crítico, pero también combativo, aunque no del todo explícito, en contra de un montón de farsantes, falsarios y falsificadores que surgieron en el primer sexenio panista y que se acrecentó en el segundo e incluso esa cosa rarísima que se decía el PRI aunque ya no lo era del gobierno de Enrique Peña Peña Nieto”, menciona.
Como historiador busca recordar que la historia es acción colectiva y social, que los individuos, los hombres y mujeres que tomaron decisiones lo hicieron de forma consciente, agrega el investigador.
De Juárez, busca dejar en claro que no fue un personaje sólo ni aislado, sino que formó parte de una élite política de más de 100 individuos que construyeron la idea de patria y que, al dirigir una guerra, construyeron también la soberanía nacional, que es el gran legado jurista, junto con la edificación del Estado mexicano.
El mayor error de Juárez, según Pedro Salmerón, fue el tratado McLane-Ocampo, aunque considera que hay que explicarlo: “El error consiste en actuar como se hacía en la época de Antonio López de Santa Anna. Es decir, recurrir a la astucia y al engaño. Pero aprendieron a partir de allí que con los principios no se negocia”.
Fuente: La Jornada