Al menos 50 personas murieron y varias resultaron heridas este miércoles en un accidente de autobús en el condado de Kericho, en el oeste de Kenia, reportó el jefe de la policía local, James Mogera.
El vehículo, que realizaba el trayecto entre Nairobi, la capital, y Kisumu, en el oeste, se habría salido de la carretera mientras descendía por una pronunciada ladera y se habría precipitado unos 20 metros, según el diario Daily Nation.
Mogera indicó que el número de víctimas podría aumentar, ya que todavía hay personas atrapadas en el autobús, que tenía capacidad para 67 pasajeros.
Entre los 50 fallecidos hay al menos ocho niños menores de cinco años. Los heridos han sido evacuados a centros de salud cercanos.
Según versiones de testigos, el accidente ocurrió en el área del Túnel, un punto en la carretera Londiani-Muhoroni. El jefe de la policía de Kericho confirmó que hay 31 víctimas masculinas, 12 mujeres y siete niños.
El jefe de la policía regional de Rift Valley, Francis Munyambu, señaló que los heridos reciben tratamiento en hospitales locales desde Nairobi hasta la ciudad occidental de Kakamega.
El inspector general de la policía, Joseph Boinett, adelantó que se ha iniciado la búsqueda del propietario del autobús, aunque no reveló su nombre.
El percante se produce cuando Kenia lucha por reducir el número creciente de accidentes de tráfico.
En 2013, el gobierno volvió a introducir los alcoholímetros, pero volvió a retirarlos después que una corte prohibió que la policía presente como evidencia contra los conductores el resultado de la prueba realizada con los aparatos para medir el alcohol en la sangre.
Según las estadísticas, alrededor de tres mil kenianos mueren cada año en accidentes de tráfico.
Fuente: Excelsior